viernes, 29 de noviembre de 2013


¿Y después de los precios rebajados?

El espectáculo del saqueo de Daka fue algo bochornoso, lamentable, triste, pues era indicación de la crisis económica y moral que reina en Venezuela. Eso fue sólo el comienzo, pues síntomas similares siguen presentes en los días actuales. El tráfico se ha hecho más enredado que nunca, pues cerca de los almacenes de electrodomésticos hay multitud de personas haciendo cola para comprar artefactos a precios rebajados por la acción del gobierno. Esta actuación del pueblo es lamentable, pues manifiesta que ha aceptado y secundado la penuria a que lo ha obligado el gobierno de hacer colas para todo, primero para comprar Harina Pan y los demás alimentos y ahora para comprar los artefactos electrodomésticos. En medio de este lamentable caos colectivo, los líderes del gobierno levantan la voz, llenos de orgullo, manifestando que con su brillante actuación están protegiendo el bolsillo de los venezolanos y a la vez están castigando a los especuladores hambreadores del pueblo. Y este show gubernamental, indudablemente de carácter político electoral, es creído por una buena parte del país, pero me encuentro entre los muchos que no lo creen. Si los precios han subido a niveles inalcanzables para la mayoría de los venezolanos se debe única y exclusivamente a las políticas económicas de este gobierno. Esas políticas son las responsables de la inflación galopante, de la escasez de dólares y del descenso inmenso del valor real del bolívar, todo lo cual causa una situación insostenible para los comerciantes, los cuales se ven obligados a subir los precios para poder subsistir. Indudablemente debe haber especuladores, pero existen porque el gobierno les brindó la oportunidad en bandeja de plata al no impulsar la producción y el abastecimiento.

La actuación, aparentemente, excelente del gobierno es similar a la que se ha presentado cuando se ha incendiado una refinería, por mala operación o falta de mantenimiento, y apagan el fuego en un día, por lo que se llenan de orgullo por su labor de apagafuegos, en vez de manifestar pena por el incendio ocurrido.

El siguiente paso anunciado será poner precio a todos los artefactos electrodomésticos, con lo que lograrán que muchos comerciantes cierren sus negocios y nos quedemos sin sitios donde comprar los aparatos necesarios para el diario vivir o que sencillamente los anaqueles se queden vacíos como quería Nicolás y cuando regresen unos pocos artefactos costarán más que antes de la presente crisis. El panorama futuro es horrible, no sólo faltarán los alimentos sino los artefactos necesarios para tener una vida decente como son los aires acondicionados, las neveras, las lavadoras, etc. Y todo ello se debe única y exclusivamente a las políticas económicas comunistoides de este gobierno que ha tornado la vida del venezolano en una verdadera tragedia.

ROBERTO MUÑOZ E.

robertom1940@hotmail.com